lunes, 6 de mayo de 2019

Maldeojos. Gaysper


Gaysper
(Artículo publicado el jueves, 2 de mayo, en diarios del grupo Prensa Ibérica)

     Es lo que tiene lo desmedido, sin control, la exageración, la tirria ciega, es lo que pasa cuando te pasas de rosca, cuando creas un enemigo sin venir a cuento y de repente ves que la cosa empieza a chirriar. Vayamos al principio. Vi en el informativo de Helena Resano, poco después de las humaredas que llegaban de las calles de Venezuela, alzada a la orden del correveidile yanqui Juan Guaidó, convertido ahora en golpista contra el Gobierno de Nicolás Maduro, ese ridículo cantamañanas que tanto mal hace al pueblo, a un muñeco, un dibujo, una figura con los colores del arcoíris, colores que simbolizan al colectivo LGTBI. La voz de la reportera que firmaba la noticia explicó que ese dibujo nació con una idea y se ha convertido en apenas unas horas en la contraria. El tal dibujo formaba parte de los terrores, de las amenazas, de los enemigos a los que un caballero con espada del partido del tío de la mula iba a derrotar en cuanto alcanzara la cumbre del poder poderoso que todo lo puede. Y una mierda.

     Ni han conseguido tantos escaños –aunque 1sería mucho, 24 no son lo esperado- ni el puto dibujo ha logrado su objetivo. Es más, el colectivo LGTBI lo ha adoptado, y lo ha convertido en Gaysper, una mezcla perfecta entre gay y el fantasma Casper. Al grano. El patético caballero que nos iba a librar de la chusma gay ha sido humillado no sólo en las urnas sino por el dibujo que ya es un nuevo icono LGTBI. La ultraderechita que se cree valiente ha sido derrotada por el ingenio y el orgullo. O sea, lo que viene siendo el tiro por la culata, señor de la barba altiva. Bop PopLate Motiv- ha dicho, “más gay que un cruce entre Judy Garland y Rocío Jurado”. Chúpate esa, Santi.




No hay comentarios:

Publicar un comentario