miércoles, 29 de mayo de 2019

Espárragos. De la vega de Villanueva Mesía a tu mesa

 El espárrago de la vega granadina.
Agromesía

       Agromesía es una cooperativa de Villanueva Mesía -Granada- que ahora está terminando la temporada del espárrago. La cooperativa, que en la exportación y venta de espárragos cuenta con unos 150 socios, alcanza los 500 miembros para gestionar la explotación de la aceituna de la zona que da como resultado un excelente aceite de oliva virgen extra de calidad superior. Su presidente es Francisco Rico Atero. Los meses fuertes del espárrago van de marzo a finales de mayo y principio de junio. La cooperativa agrícola de Villanueva Mesía forma parte de una gran cooperativa granadina, Espárragos de Granada, que la componen Agromesía, Espafrón, Afroláchar, Vega Chauchina y Espalorquina, de Fuentevaqueros. Agromesía da trabajo a más de 104 personas, la mayoría mujeres en las labores de manipulación, desde el escandallo a la selección por tamaños o la preparación del manojo con el fajín del etiquetado. El espárrago de Villanueva Mesía es muy preciado no sólo en el mercado nacional -Mercadona comercializa el producto en toda España- sino internacional, con importaciones a Alemania, Suiza, Francia, Dinamarca, o Canadá. La actividad en un día normal de mucho sol, con llegadas masivas de agricultores a las dependencias de la cooperativa, es frenética. El espárrago se trata con un mimo especial para que permanezca terso, fresco y apetitoso desde que se corta en el campo hasta que llega a la mesa del consumidor. Un proceso milimétrico de refrigeración, lavado, corte del tronco inservible para la venta, confección de manojos según el grosor, o sea, calibrado, peso, y el broche final de las cajas terminadas, listas para un viaje a miles de kilómetros del pueblo, forman parte de una representación que apenas conoce el descanso en esta factoría durante los meses de alta cosecha. Miles y miles de kilos de espárragos de esta zona de la vega granadina recorren el país, traspasan fronteras, y llevan el nombre de Villanueva Mesía a los confines del mundo.

Imagen de Agromesía en una zona de olivares en Villanueva Mesía
Llegada de espárragos a la cooperativa recién cortados en el campo.

Un operario maneja el torito que traslada la corta del campo a la zona de pesado.

En la báscula digital.

El peso reflejado en la pantalla se anota de forma automática en el expediente del cooperativista.


Esta información variable nunca viene mal.

Manojos de espárragos en bruto. Sólo llevan el código de barras del cooperativista, 
pero aún queda un largo proceso de acabado.


La nave vista desde los huecos entre cajas que han pasado la noche en refrigeración.

Aquí empieza el viaje del espárrago a través de las cintas. Los manojos remojados en agua pasan 
a la mesa donde se abrirán para liberar al espárrago y poder ser manipulado.


Detalle del primer manipulado de los manojos de espárragos.


La operaria corta la goma, libera los espárragos, y los introduce en la cinta transportadora.



El espárrago se coloca con la cabeza hacia abajo para llegar a la guillotina
y adquirir el tamaño adecuado y uniforme en todo el manojo.

La misma operación se hace en la segunda cinta.

Entrada a la cortadora y salida de troncos desechados.

Vista general de las operarias en las cintas de preparación del espárrago antes de salir de Agromesía.



En los primeros puestos de las cintas transportadoras se hace una rápida selección del espárrago 
para formar manojos según el grosor del producto requerido por el cliente.

Vista cenital de la cinta transportadora en la selección del espárrago.


Las trabajadoras, concentradas en su labor.





Estas operarias controlan el peso adecuado de los manojos.


Ajuste del peso requerido.

La actividad es incesante durante la jornada laboral.


Aunque parezca lo mismo, cada trabajadora es responsable de un cometido particular.

Los códigos de barra son un detalle de primera importancia.

Las trabajadoras empiezan a colocar los diferentes fajines para identificar el producto.


Vista general.

La higiene es una de las pautas que rigen el proceso de manipulación del espárrago.
La temporada del espárrago es recibida con alivio en el pueblo porque es sinónimo de trabajo.

De las más de 100 personas que trabajan, la mayoría son mujeres.
Primer plano de una operaria.

A punto de terminar el proceso.
Tal vez el espárrago que está seleccionando esta chica llegue a una mesa de Canadá.
La encargada da instrucciones a las trabajadoras.
Columnas de cajas listas para iniciar su distribución nacional e internacional.
Vista general de la nave en una mañana de finales de mayo.
A la izquierda Francisco Rico Atero, presidente de Agromesía, con...



...el responsable del control para la salida final de la nave.


Manojos de espárragos de la vega del Genil granadina listos 
para su comercialización con el fajín identificativo de Agromesía.


Y mañana, o el año que viene...
Vuelta a empezar.



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