¿Cambiar?
(Artículo publicado el domingo, 2 de agosto, en periódicos de EPI PRESS)
Como grupo audiovisual cerramos el
semestre líderes de audiencia en televisión e Internet y, como empresa, lo
hacemos con una máquina tremendamente eficiente que nos ha permitido aumentar
los ingresos y reducir los costes, respetando y siendo fieles a nuestro
compromiso con el mercado y con nuestros accionistas. Habla el gran Paolo, el
señor de las moscas, Paolo Vasile.
Lleva razón el empresario. Su máquina es eficiente, tremendamente eficiente
dice él. Y es verdad. Su máquina, Mediaset, ha ganado en el primer semestre,
cerca de 98 millones de euros. ¿Cómo los ha ganado? Don Paolo lo tiene claro,
aumentando los ingresos y reduciendo los costes. Y de nuevo lleva razón. A la
vista está que ha aumentado los ingresos, y que los accionistas le pondrán
velitas cada semana, y que ha reducido los costes porque la programación de
Telecinco y Cuatro…
Bueno, la programación de Telecinco y
Cuatro, sin entrar en detalles, gira en torno a lo mismo que giró el pasado
año, y el anterior, y así hasta el infinito. Telecinco es una gran mamma, como
esas señoras que nunca tiran nada porque no hay comida que no se pueda reciclar
y que basan sus platos en productos básicos, no sofisticados, pensados para la
tropa, no para el generalato. Telecinco a la mierda le da muchas vueltas para
que parezca otro plato. Por poner un ejemplo. ¿Cuántos meses lleva enlazando
los llamados programas de convivencia, sea entre gente “famosa” o entre gente
que no la conoce ni el vecino, como la última cagarruta, Pasaporte a la isla? Pues yo creo que desde que doña Mercedes Milá cerró la puerta de la
última edición de Gran Hermano. Don
Paolo sabe que con tan pobres ingredientes su audiencia está satisfecha. ¿Para qué cambiar?
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