miércoles, 1 de agosto de 2018

Maldeojos. Baboseo


Baboseo
(Artículo publicado el martes, 31 de julio, en diarios del grupo EPI PRESS)

     Es impropio de un trabajo serio, impropio de un periodista que se tenga por tal, impropio en una televisión pública. Hablo de la entrevista –o lametón de culo y pilila, de cuerpo y alma- que le hizo el señor Jenaro Castro a Pablo Casado. Verán, el tal Jenaro, nombre por el que apostó el PP para ser el jefazo de RTVE, es el director de Informe Semanal, y Pablo Casado es Pablo Casado, el líder del Partido Popular. ¿Y? Pues que al director del mítico programa de reportajes periodísticos, que fue bandera de calidad y credibilidad, no se le ocurrió otra cosa que entrevistar al presidente del PP en la sede del partido y hacerla él mismo. Perfecto. Que el director del programa decida eso quiere decir que el programa considera importante, muy importante, el cambio gracias a las primarias que ha dejado a un PP magullado, dividido, y ahora en fase quirúrgica de costura de heridas.

     Lo malo, lo peor, lo insultante, lo impropio, lo inaceptable,  viene cuando el espectador asiste a la entrevista, es testigo del disparate, del desbarre, de la predisposición del que pregunta, del lenguaje verbal y no verbal, de ese dejar claro que el entrevistado no ha de temer nada, que está en terreno amigo, que no se indisponga, que no se soliviante, que no se preocupe, que todo está controlado. Y entonces te da una especie de arcada, ganas de blasfemar, una evidente sensación de estafa, de pérdida de tiempo, de que lo que ves y escuchas no es la entrevista que ha de hacerse en Informe Semanal sino, tal vez, en la sección marciana de Corazón para dar rienda suelta a la periodista que la presentadora Anne Igartiburu lleva dentro. “¿Cómo preguntaría el periodista que no fue Pablo Casado, por lo del máster?”, inquiere Jenaro.  Basta. Límpiense las babas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario