Caníbal
(Artículo publicado el martes, 9 de febrero, en diarios de EPI PRESS)
El domingo
emitió La 2 Caníbal, película de 2013 que protagoniza Antonio de la Torre –un caníbal que en su juego de introspección
parece comerse a sí mismo en un trabajo brillante y perturbador- y dirige Manuel
Martín. Media hora antes, en La Sexta, volvía Jordi Évole y Salvados con
una traca periodística de primer nivel, El machismo mata. De Salvados, de su rigor, de su
realización, de esa forma tan cuidada de tratar los temas, con imágenes y un
montaje de primer nivel, apenas se puede decir más. Es uno de los referentes
del periodismo televisivo, que tiene sus propias reglas. Nada que ver con lo
que expele Cuatro con el nombre de Soy
noticia, show circense que protagoniza con caras de asombro Nacho Medina, hijo del periodista
granadino Tico Medina, al que a
veces he visto en Canal Sur con el gesto congelado. Su ego es ilimitado.
Bien. ¿Qué hacer
cuando una oferta excelente coincide con otra del mismo corte? ¿Qué sacrificas,
la historia del caníbal o el documento, también desasosegante y doloroso, de un
tipo que maltrataba a su mujer diciendo, mientras te revuelves en el sillón,
que a su pareja la llamaba chacha, florero, y que se le daba bien humillarla?
¿Cómo dejar a esa mujer que asegura que las hostias no son nada porque el dolor
se diluye, pero que jamás se olvida que te llamen tonta, te escupan a la cara,
y te digan que eres una inútil? Ahora, escribiendo, recuerdo por qué opté por
pasarme a La 2 y ver la ficción. No estaba en mi mejor momento. Esos
testimonios me herían demasiado. Opté por volver a Salvados en diferido, a través de Atresplayer. Cada vez lo hace más
gente. Es otra forma de ver la tele. Cuando tú quieras, sin cortes, como un
exquisito caníbal, un gourmet catódico.
Un momento de la conversación de Jordi Évole con esta mujer, víctima de malos tratos de un descerebrado que la humillaba hasta conseguir anularla como persona. El regreso de Salvados fue de los que no dejan indiferente. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario