Por
caridad
(Artículo publicado el martes, 7 de octubre, en diarios de EPI PRESS)
Era de esperar que
al llegar el día en que Isabel Pantoja
guardara sus batas de cola porque en el trullo no pintan nada, la tele babeara
y salpicara hasta los telediarios. Aún no sabemos si irá o no a la cárcel, lo
que añade tensión a la tensión. Sálvame
de Luxe entró en shock y se olvidó unas horas del ombligo de sus eminentes
actores y consiguió otro de sus hitos llegando al 20 % de audiencia, dos
millones trescientas mil criaturas viendo a la conca de Jorge Javier pero en ropa de domingo mientras hacían malabares para
que ese fresco maná, gratis, no acabara nunca. Se desveló el desvelo de una
sobrina de la delincuente al saberse que una tal Anabel Pantoja pidió dinero a Belén
Esteban por ver si se alcanzaba el millón de
euros que ha de pagar su chacha para eludir la trena.
La señora
Esteban lo confirmó, y dijo que no tenía ese dinero, pero que si lo tuviera
tampoco se lo dejaría a nadie porque “es para mi hija Andrea, para el día de mañana”. Recuerden que todo encaja en
alguien que por su hija ma-ta. Al parecer el rollo sincero recorrió el plató y
hasta Jorgeja dijo haber recibido la llamada. El catalán no desveló su
posición, pero recuerdo que es de Badalona. Sin embargo, de todo el circo, lo
que me llama la atención es la Asociación Cultural Buena Suerte, fans de la
quinqui condenada en firme por blanqueo de dinero, que ha abierto una cuenta
para colaborar “con Isabel en el pago de la multa”. Este país es la bomba. Los
chorizos se carcajean haciendo sus fechorías a nuestra espalda, pero resulta
que cuando los pillan, o los votamos, o nos organizamos para que eludan sus
penas. ¿Quién lo entiende?
Isabel Pantoja, delincuente acusada de blanqueo de capitales, ayer, justo cuando entraba a los juzgados de Alcobendas para recibir la notificación de la Audiencia Provincial de Málaga que le da 10 días para ingresar "voluntariamente" en prisión. |
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